Montserrat Maspons
No nos sorprendió la noticia, su salud estaba afectada desde hace algún tiempo y bien hizo el Señor en llevársela a su lado. Ya Montserrat Maspons y Bigas, descansa en paz y goza de la Gloria Eterna. Nos dejó eI sábado 2 de Julio del 2016. Su trayectoria en el campo cultural de la pintura, la cerámica y la escultura, así como su labor humanitaria con los ancianos desamparados y la entrega patriótica que siempre tuvo en la defensa de los intereses de nuestra ciudad, le tocan a otros resaltarla, ni se diga de su entrega al Casal Catalá, del cual era Presidenta Vitalicia.
Nos referimos a continuación a su labor como amante de la naturaleza y como pionera de la arborización de nuestras avenidas y benefactora del Jardín Botánico de Guayaquil, así como Socia Fundadora y Honoraria de la Asociación Ecuatoriana de Orquideología. Tuvo una labor destacada en la Agrupación Femenina de Arborización de Guayaquil, que ella lideró, que permitió que muchas avenidas de Guayaquil se llenaran de árboles y por primera ocasión también de palmas,
haciéndolo en una forma adecuada y técnica para no causar daño a la infraestructura urbana, apoyando al Departamento Municipal de Arborización y Parques para que
instalara un vivero forestal en terrenos de Inmaconsa, el cual aún trabaja y produce árboles para la arborización urbana. Para colaborar en este labor invitó en repetidas ocasiones a su amigo, el destacado horticultor catalán Juan Bordas quien dicto cursos de capacitación a los jardineros del Jardín Botánico y del Municipio de Guayaquil.
Posteriormente, junto a un grupo de personas amantes de la naturaleza, constituyen la Asociación Ecuatoriana de Orquideología (1974) y la Fundación Jardín Botánico de Guayaquil (1995). El 90% de las palmas que tenemos en el Jardín Botánico fueron donadas por ella, las mismas que nacieron de semillas que ella recolectó en sus viajes al exterior y que sembró y propagó en El Palmar, finca de su propiedad que actualmente alberga la más importante colección de palmas en el Ecuador, la que debe conservarse como un homenaje viviente y permanente a su memoria. Expresamos a sus familiares nuestra solidaridad al mismo tiempo que le aseguramos que ella estará presente en nuestros recuerdos y oraciones, especialmente cuando pasemos frente al mural de cerámica de la "Plegaria del Árbol" que ella realizó y donó al Jardín Botánico y que lo instalamos en la entradadel Auditorio.